Seguimos con nuestra serie “Los Riesgos y Retos de las Marcas”, con un tema muy divertido que te ayudará a visualizar cada vez mejor cómo “ponerle cara” a tu marca.

Ya hablamos del insight del consumidor, después hablamos del posicionamiento.

La tercera parte, de la que hablaremos hoy, es la de la personalidad de la marca. A diferencia del posicionamiento, es todo lo que está alrededor de la marca, lo que comunicas. El tono y la voz que tiene la marca. Entonces, si lo viéramos como una persona, puede ser una marca amistosa, amigable, juguetona, seria, responsable. Entonces, ¿cuál es esa personalidad?

Dándole cuerpo y “poniéndole cara” a tu marca

Cuando definimos la personalidad de la marca lo tratamos de hacer de una manera muy simplificada. Hay que establecer esas cuatro o cinco palabras que nos definan esa personalidad. Y para lograr eso, normalmente nos apoyamos con un tipo de ejercicios en donde, en lluvia de ideas, podemos empezar a generar la personalidad de la marca.

Define la personalidad de tu marca

Aquí van algunas sencillas preguntas que te ayudarán a visualizar más claramente tu marca:

1. Sobre su físico: “Si nuestra marca fuera una persona y en este momento entrara en este cuarto, ¿cómo sería?” Alguien alto, bajo, serio… Trata de imaginarte hasta qué traería puesto.

2. Sobre su discurso: “¿Qué es lo primero que nos diría la marca? ¿Y cómo lo haría?” De una manera gritona, sigilosa, reservada… Todo esto va definiendo el tono de la comunicación.

Si damos forma a nuestra marca, podemos generar esa personalidad que estamos buscando que proyecte. Entonces, ya tenemos dos factores parecidos: El posicionamiento, que es el lugar que queremos ocupar en la mente del consumidor, que cuando piense en “x” piense en mí como negocio; y dos, cuando me vean, ¿cómo va a ser?

El tono de voz, por ejemplo, de las marcas que se anuncian en la radio, en algunos casos siempre son muy amables, otras son muy mandatorias, otras te dicen qué tienes qué hacer. Eso no está mal ni está bien, simple y sencillamente son caminos que tú decides aplicar o ejecutar en un momento dado.

En la siguiente serie hablaremos de cómo trabajar en ese posicionamiento con la personalidad de tu marca y cómo lograr que la estrategia se desarrolle. No olvidemos que la función principal de la estrategia de marca es establecer cómo hacerla crecer. Si es nueva, ¿cómo le tengo qué hacer? Si es una marca que todo mundo conoce, ¿qué es lo que tengo qué hacer?

El posicionamiento y la personalidad nos van a ayudar mucho para tener una ejecución muy precisa, y más ahorita que los recursos no están a la orden del día para hacer todo lo que quisieras hacer. Mantente al pendiente de lo que sigue en la serie “Los Riesgos y Retos de las Marcas”.

Yo soy Jorge Vázquez, director de la agencia Visual Creativos. ¿Cómo sería tu marca si la visualizaras en forma de una persona? ¿Lo habías pensado? ¡Esperamos tus comentarios!